A compensación de emisións de CO2, unha oportunidade de atraer investimentos para a restauración de montes
Una jornada organizada por Abanca Agro, en colaboración con la Fundación Arume, abordó la oportunidad que representa la descarbonización de la economía para el monte gallego. El evento sirvió para poner de manifiesto que las empresas interesadas en compensar sus emisiones de CO2 tienen la posibilidad de invertir en proyectos de restauración de montes en Galicia, una línea con grandes expectativas para los próximos años.
El presidente de la Fundación Arume, José Carballo, intervino en la jornada, destacó que la Fundación Arume es un canal privilegiado que puede encauzar las inversiones en el monte de empresas y marcas, sobre todo gallegas, para compensar sus emisiones de gases de efecto invernadero.
En la actualidad, en Galicia solo hay puestos en marcha seis proyectos de compensación, que suman 47 hectáreas, pero la perspectiva es que esa línea de trabajo crezca de manera progresiva. La Fundación Arume, una entidad sin ánimo de lucro que agrupa a toda la cadena forestal de Galicia dispone de la capacidad técnica y metodológica para la puesta en marcha de este tipo de iniciativas.
La compensación de emisiones de las empresas puede realizarse, por ejemplo, mediante la restauración de montes afectados por incendios forestales o que estuvieran desarborados los últimos 30 años. Es una vía que abriría la puerta en la comunidad para la regeneración de montes que se encuentran degradados o en estado de abandono.
Cambio climático y bioeconomía
Durante la jornada, Marta Hernández, de la Oficina Española del Cambio Climático, explicó que la industria manufacturera y las empresas de transporte son las que están apostando más por planes de descarbonización, que llevan consigo tanto el cálculo de las emisiones propias como proyectos asociados para compensarlas. Hay en toda España más de 1.300 entidades inscritas en el registro de compensación de emisiones creado por el Ministerio de Transición Ecológica.
El esfuerzo por reducir la huella de carbono también está siendo uno de los ejes de trabajo de entidades agrarias gallegas como la cooperativa Clun, segundo explicó la directora de Innovación y Calidad de la cooperativa, Sabela Hueca.
La jornada contó también con la participación de Eduardo Rojas, presidente decano del Colegio Oficial de Ingenieros de Montes, que puso en valor a bioeconomía y reivindicó el papel social, ambiental y económico de los bosques en el marco de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Por parte del conselleiro del Medio Rural, José González, se destacó la importancia de recuperar los montes quemados, pero el conselleiro también subrayó la necesidad de mejorar la prevención. “En este 2020, solo en los 4 días de incendios de septiembre, en los que se quemaron 11.000 hectáreas, se emitieron 148.000 toneladas de CO2 a la atmósfera”, detalló González.
Por su parte, Abanca, organizadora del acto, incidió en el potencial del sector forestal gallego en los retos que se presentan ante las nuevas normativas europeas. Francisco Botas, consejero delegado de Abanca, hizo un llamamiento a aprovechar “las oportunidades derivadas del giro hacia la economía verde, que nos encamina hacia una reducción de las emisiones y el uso de recursos renovables, justo lo que la madera puede ofrecer”.
Del peso del sector forestal en Galicia da idea el trabajo de Abanca en este ámbito. En lo que va de año, Abanca concedió financiación al sector forestal por importe de 62,7 millones de euros, un 36,9% más que en el 2019, en los que se incluyen 3.000 clientes, la mayoría en Galicia, vinculados la distintas actividades de la cadena de valor de la madera.
El consejero delegado de Abanca destacó la colaboración entre todos los integrantes de la cadena de valor para conseguir que el sector continúe creciendo. En esta misma línea de colaboración, Botas encuadró iniciativas como la participación de Abanca en la Fundación Arume.